El mal conmigo.

Tan agradable, tierna, dulce
Te ves detrás del cristal de la sensibilidad.
Yo, el hombre más dichoso y afortunado que pueda existir.
Después te invaden las mentiras
Rompes el cristal de la sensibilidad y dejas de ser agradable, tierna y dulce.
Yo, el hombre mas desdichado que lucha para unir las piezas del cristal para armar nuevamente lo agradable, tierno y dulce….
Es la última pieza,
Vienes corriendo y destruyes mi esfuerzo, mis sentimientos.

Me levanto, te agarro y lucho contra la mentira, el desprecio, ese deseo de no hacer cosas conmigo, tu ingratitud…
Te suelto y estas herida, pues la mentira, el desprecio, la ingratitud continúan ahí, me muestras el dedo, te burlas de mí.
Quisiera la mujer agradable, tierna, dulce, que mira detrás del cristal de la sensibilidad.